El ciudadano Omar Bonilla Meléndez, de 43 años y originario de Rivas, fue muerto en Guatemala con ráfagas de fusil AK 47 por tres pandilleros a quienes denunció por intentar entrar a su casa a robarle en dos ocasiones.
Norma Meléndez, madre de la víctima, dijo que su hijo emigró hacia Guatemala hace 19 años en busca de mejores oportunidades de vida.
“Trabajaba como supervisor de una empresa de reciclaje, donde era muy querido al igual que donde vivía con su cónyuge salvadoreña y sus hijos de 16 y 18 años, pero como denunció a los pandilleros, lo asesinaron en represalia”, aseguró doña Norma
El crimen del nica sucedió cuando salió de su casa a la calle a ver qué había ocurrido con su hijo Carlos, ya que los pandilleros lo habían interceptado. En ese momento los delincuentes lo rafaguearon con un AK, comentó la progenitora.
Posterior a la balacera, Bonilla fue llevado grave a un hospital donde fue intervenido quirúrgicamente, pero el 14 de diciembre falleció, mientras que su hijo Carlos salió ileso milagrosamente del atentado.
Los restos de Omar Bonilla, quien era conocido cariñosamente como “La Cumba”, fueron repatriados a Rivas y hoy jueves sus familiares y amistades le dieron el último adiós.