El cuerpo de la coterránea Santos Teresa Olivas González, fueron repatriados este martes desde una funeraria de San Joaquín de Flores, en Costa Rica, a San Juan de Río Coco, departamento de Madriz.
La nicaragüense falleció el lunes, al ser atropellada por un bus en La Garita de Alajuela, Costa Rica, cuando iba hacia su trabajo en Orotina, dijo Jairo Alfredo Petray Olivas, uno de dos hijos que vivían con ella en ese país.
Agregó que hay dos versiones del accidente en que pereció su madre: una que fue una imprudencia de ella, y la de unos testigos que contaron que el conductor del bus aceleró y terminó llevándosela.
“Debo esperar un mes para que me den los resultados de la autopsia”, agregó.