Tras realizar las investigaciones respectivas, la Policía de Masaya concluyó que la señora Silvia Elena Jarquin Velásquez, 32 años, murió desnucada de forma accidental después de rodar por las gradas de un restaurante ubicado en las laderas de la laguna de Masaya.
Aunque inicialmente se especuló que la infortunada se había suicidado lanzándose de cabeza al vacío, la Policía indicó que Silvia Elena era tomadora consuetudinaria y tropezó cuando caminaba por las gradas del restaurante Bucaneros y fue a parar varios metros abajo.
Las causas de la muerte fueron confirmadas por la doctora Darling Putoy, forense de la Ciudad de las Flores, mientras que el cuerpo de Silvia Elena Jarquín fue trasladado a la que fue su casa de habitación en el barrio Martín Castellón, de Nindirí, donde dejó a dos niños en la orfandad.