El cadáver del nicaragüense Reyes Antonio Amador López, de 54 años, fue encontrado en estado de descomposición y cubierto con una sábana, en el interior de su casa ubicada en San Juan de la Quebrada, en Costa Rica.
De acuerdo con el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), los autores del crimen primero ataron con las manos hacia atrás al pinolero y luego le clavaron un par de puñaladas en la nuca.
El cuerpo de la víctima tenía una camiseta amarrada en el cuello y en el patio de la casa había un mecate colgado, por lo que presumen que los criminales también intentaron ahorcarlo.
Según las investigaciones, por la saña con que fue asesinado Reyes Amador, se presume que fue una pasada de cuentas o robo, pues en la vivienda faltaban varios artículos de valor, dinero y joyas.
Carlos Arguedas, vecino de la víctima, describió a Reyes Amador como un buen hombre, y la última vez que lo vio con vida fue el pasado jueves, día en que le ayudó a ingresar a su casa, dado que la víctima había sufrido hace varios años la amputación de una de sus piernas.
El cuerpo de Reyes Antonio Amador López fue trasladado a la Morgue Judicial de Costa Rica, para realizar la respectiva autopsia, y avanzar en las investigaciones del caso.