Al menos tres años vivió como un rey en California, Estados Unidos, uno de los líderes del Cártel de Jalisco Nueva Generación, un grupo criminal sanguinario que ha causado mucho dolor a los mexicanos y estadounidenses.
Cristian Fernando Gutiérrez Ochoa, de 37 años, fingió su propia muerte y creó una identidad falsa para vivir en una mansión de lujo en Riverside.
Pero como la mentira tiene patas cortas, ahora está en prisión acusado de cargos federales, entre ellos tráfico de drogas y lavado de dinero.
Gutiérrez Ochoa es yerno del líder del cártel Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, y se apoyó en él para escapar de México, dijeron los fiscales.