Javier Antonio Reyes, de 32 años, murió al ser embestido por una camioneta con placas costarricenses cuando se salió de un bar a contestar una llamada a su celular a orillas de la vía, en el kilómetro 53 de la carretera Niquinohomo-Masatepe, en el departamento de Masaya.
Aunque Reyes fue auxiliado de inmediato por personas que estaban en el lugar, ya no había nada que hacer porque su muerte fue inmediata.
Tras el accidente, la policía arrestó al conductor de la camioneta del que no se reveló su identidad, mientras que el cuerpo de Javier Antonio Reyes fue trasladado a su casa en Masatepe, para su vela y posteriores funerales.