El susto de su vida se llevó don José Luis Borge Ibarra, de 36 años de edad, al llegar a una de sus propiedades en el barrio Concepción, del municipio de Camoapa, en Boaco, y encontrar muerto sobre una cama a su trabajador, José Rafael Lara Zamora, de 52 años.
Don José Luis dijo a la policía que cuando él llego a la casa comenzó a buscar a José Rafael, ya que no estaba en el frente de la vivienda, y fue así que lo encontró tilinte en la cama donde el vigilante se echaba un pelón.
El doctor Luis Marenco, fue llamado por la policía y dictaminó que la muerte de José Rafael Lara Zamora, se debió a un infarto al corazón que le sobrevino mientras estaba dormido.