Jason Osmar Ruiz Gutiérrez, de 16 años, se quitó la vida colgándose del cuello con un mecate en una viga de su casa en el barrio Sandino, de la ciudad de Ocotal, en Nueva Segovia.
Jason Ruiz fue encontrado colgado del cuello por su tío Luis Manuel Gutiérrez Ruiz, quien lo trasladó al hospital Alfonso Moncada Guillén, con la esperanza de que pudieran salvarlo, pero ya no tenía signos de vida.
Tras revisar el cadáver, el médico forense de turno, doctor Pedro Joaquín Matute, descarto mano criminal, y confirmó que falleció por asfixia mecánica por ahorcamiento.
Por otro lado, el señor Guillermo González Herrera, de 62 años, ingresó sin los signos vitales en el hospital Alemán Nicaragüense después de haberse tomado una tableta para curar frijoles.
El señor González Herrera habitaba de donde fue la gasolinera Shell Waspán dos cuadras al sur y media al Este, en donde sus familiares firmaron una carta a la Policía para que no trasladara el cuerpo a Medicina Legal.
Por otro lado, Bayardo Ramón Rivas, de 44 años, se quitó la vida colgándose del cuello con un mecate en la casa de Ángel Pérez, en la comarca Cedro Bonito, de Muelle de los Bueyes, Caribe Sur, por presuntos motivos pasionales.
Averiguaciones policiales dan cuenta que hace cuatro meses, la cónyuge de Bayardo lo dejó cansada de ver que tenía siete años de andar bebiendo guaro, y al verse solo arreció la borrachera y bajo los efectos del guaro, decidió autoeliminarse.