Jinotegano no aguantó regañada y se suicidió con Gramoxone

Erick Manuel Hernández González, de 22 años, le puso fin a su vida ingiriendo una pichinga con el letal herbicida gramoxone, después de discutir con sus familiares a quienes ya tenía aburridos de verlo borracho, en la comarca Santa Clara en Jinotega.

Doña Fátima Herrera relató que al ver borracho una vez más a su hijo Erick, procedió a regañarlo para que dejara el vicio, momento en que el ahora occiso se puso violento e intento golpearla.

Ante el hecho, Oscar González tuvo que interferir para que su hermano Erick no golpeara a su progenitora, y la situación no se tornara más violenta.

Sin embargo, Erick Manuel Hernández González ingresó a su cuarto para ingerir el herbicida, siendo encontrado minutos después vomitando espuma, por lo que sus familiares lo trasladarlo al hospital Victoria Mota donde minutos después murió.

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