A la par de un charco de sangre fue encontrado muerto el tomador consuetudinario Noel Antonio Acuña Martínez, de 30 años, en las inmediaciones de la terminal de buses del mercado Ernesto Fernández, de la ciudad de Masaya.
Según algunos lugareños, Noel Acuña Martínez tenía 15 años de ingerir licor, lo que provocó que terminara vomitando la sangre producto de la destrucción de varios órganos, lo cual terminó matándolo.
El infortunado habitaba en el barrio Dolores Bonilla, de la ciudad de Masaya.