A como dice la canción de Julio Iglesias, “Por el amor de una mujer”, el joven Gerardo Rafael Díaz Peralta, de 26 años de edad, fue asesinado de un machetazo en la nuca que por poco lo decapita, en la comunidad Las Pozas, en la comarca Wamblán, en el municipio de Wiwilí, en el departamento de Jinotega.
Cazadores de noticias informaron que el autor del crimen es Efraín Acuña Salinas, de 38 años y habitante de la misma comunidad, quien sorprendió a su esposa Albertina Ramona Moreno Rodríguez, de 40 años, viéndose a escondidas con Gerardo Díaz en una casa abandonada.
El hecho de sangre ocurrió en la propiedad de don Gerardo Díaz González, de 56 años, cuando la víctima estaba reunida con su amante Albertina Moreno y de pronto apareció Efraín Acuña, quien sin decirle nada le asestó un machetazo en el cuello, causándole una muerte instantánea.
Tu Nueva Radio Ya conoció que Albertina salió de su casa supuestamente hacia la casa de una hermana junto a su hija de 7 años, pero ya había quedado de verse con Gerardo, con quien sostenía una relación de pareja, desde hacía seis meses, lo cual fue descubierto por el marido traicionado.
Después del crimen, don Justo Acuña Flores, dijo que a las 8 y 20 minutos de la mañana se presentó a su casa su hijo Efraín y le refirió que había cometido una cagada, que había matado a Gerardo ya que lo había encontrado con su mujer Albertina. Después de eso, el homicida se bañó y dijo que iba hacia Honduras.