A punto de ser quemada por su propio hijo, identificado solo como “Jorge”, estuvo Doña Socorro del Carmen Murillo, de 65 años, en el barrio Miraflores, ubicado en el kilómetro 16.5 de la carretera a Xiloá, en Managua.
El desnaturalizado hijo primero agredió por negarse a darle reales para sus drogas y cuando intentaba prenderle fuego a la casa con todo y la mujer que lo parió los vecinos intervinieron tras escuchar los gritos de auxilios y desesperación de Doña Socorro del Carmen.
Jorge fue amarrado a un poste del tendido eléctrico mientras la mujer era apoyada y tranquilizada por sus conocidos mientras esperaban a las autoridades policiales.
Lugareños indicaron que el despiadado de Jorge ha sido la “Oveja negra” de Doña Socorro del Carmen, tiene antecedentes de robo e incluso recientemente cumplió condena y regresó a la casa seguir siendo el azote de la vecindad y de la mujer que lo trajo al mundo.
“Ya no lo aguantamos, se nos ha metido a robar en varias ocasiones, todo para mantener su vicio”, denunció Don Ernesto Mayorga, vecino del lugar.