De milagro quedó vivo el hondureño Mario Prado, luego que la cabina del furgón en que viajaba quedó destrozada al impactar con una rastra cargada de caña en la zona conocida como San Roque, del puente de Ochomogo, 500 metros al sur, en la carretera Panamericana Sur.
Según Prado, anoche viajaba hacia el puesto fronterizo de Peñas Blancas, cuando de pronto vio un enorme bulto en la carretera y por la velocidad que llevaba, solo le dio tiempo de realizar un medio giro para no impactar de frente, lo que le ayudó a salvarse de una muerte segura.
En tanto Reinerio Castro, quien conducía el camión que jalaba la rastra cargada de caña hacia el ingenio Benjamín Zeledón, dijo que trataba de ingresar a un desvió hecho para el transporte pesado, cuando sintió el “chimbazo” que lo sacó de la vía.