Un escopetazo en la mandíbula acabó con la vida de Santos Gilbert Gutiérrez, de 22 años, quien se disparó accidentalmente cuando manipulaba el arma mientras ingería licor con su suegro en la finca La Concepción, ubicada en la Comunidad Puertas Negras, municipio de Matiguás, departamento de Matagalpa.
Según el suegro de la víctima, Santos Gutiérrez tenía la manía de manipular constantemente la escopeta, y mientras bebían guaro el arma se le accionó accidentalmente y el disparo le impacto en la mandíbula, ocasionándole una muerte inmediata.