La ciudadana Dalila Arelys Bermúdez Cano, de 38 años, se privó de la vida mediante la asfixia en la casa que habitaba en el barrio Ricardo Rivera, en el municipio de Diriomo, en el departamento de Granada.
Algunos familiares dijeron que Dalila padecía de esquizofrenia y en distintas ocasiones había manifestado sus intenciones de quitarse la vida, lo cual llevó a cabo acostándose a dormir con una almohada en la cara.
El cuerpo fue entregado a su mamá Erenia Cano para velarla en la que fue su casa en el costado sur del restaurante El Aguacate, en Diriomo.