“Tenía que matarlo. Era el o yo. Ya me había dicho que me iba a matar”, dijo en su defensa José Luis González, luego que lo capturó la Policía, tras matar a Marcos Amador Pérez, de 30 años, a quien consideraba su amigo, en San Pablo de Masague, en Siuna, Caribe Norte.
De acuerdo a las autoridades ambos hombres habían discutido y Marcos Amador decidió irse a su casa, pero fue seguido por José Luis, con quien se trenzó a los golpes y en el forcejeo, este le clavó un cuchillo en el cuello, degollándolo.
La Policía afirma que en el crimen también participó Danilo Mendoza Gómez, trabajador de José Luis, quien garroteó a Marcos al ver que estaba ganando la pelea.
Ambos sujetos ahora serán procesados por el delito de homicidio, pero a José Luis González, también se le sumara el de portación ilegal de arma, al decomisarle un revólver calibre 3.57 que andaba sin partida de nacimiento.