Con síntomas de intoxicación fue trasladada al hospital Oscar Danilo Rosales, en León, la joven Glennis Rugama Reyes, de 20 años, quien se puso a beber guaro hasta convulsionar, en el parque central de la ciudad universitaria.
Según familiares, Glennis Rugama creía que se iba a acabar el guaro en el mundo, y pasó varias horas “empinando el codo”, hasta que se desplomó en la mesa donde tenía todas las botellas de guaro que se había tapineado.