Gustavo Adolfo Cruz Ruiz, de 38 años de edad, murió a causa de 18 inyecciones para el dolor que le aplicó un amigo en el barrio Carlos Núñez, en Jinotepe, según denunciaron sus familiares ante las autoridades policiales.
Carla Velásquez, hijastra del ahora occiso, dijo que el suceso ocurrió el pasado domingo cuando Gustavo Cruz al sufrir fuertes dolores en el cuerpo recurrió a su amigo para que lo inyectara, y en horas de la noche murió.
Mi padrastro padecía de ácido úrico y no quiso ir al hospital, dijo Carla Velásquez quien refirió que el amigo de don Gustavo lo inyectó al parecer insulina mezclada con otra sustancia en la espalda, pies, manos y piernas.
El ahora occiso trabajaba como conductor en una ferretería y deja en la orfandad a un adolescente de 14 años de edad.
Su cuerpo fue velado en casa de sus familiares en el barrio Cruz de Guadalupe, en Jinotepe, y posteriormente sepultado la tarde de este martes.
Sobre la persona que aplicó las inyecciones, parientes de la víctima indicaron que no tiene documentos para ejercer la medicina por lo cual el caso es investigado a profundidad opor las autoridades policiales de Carazo.