La Policía de Costa Rica capturó a dos pinoleros armados con fusiles AK, entre ellos a un delincuente conocido como “Chico Adoquín”, quien participó en la masacre de cuatro agentes policiales nicaragüenses en la comarca San Ramón, del municipio de San Carlos, en Río San Juan, en enero del año pasado.
Los pistoleros fueron identificados con los apellidos Reyes y Jiménez, quienes se encontraban en Costa Rica en condición migratoria irregular, y fueron presentados al Ministerio Público de Upala.
El Ministro de Seguridad Pública de Costa Rica, Michael Soto Rojas, explicó que la captura fue realizada en el distrito de San José de Upala, por donde los sujetos viajaban a bordo de un microbús e intentaron escapar a una persecución policial.
Uno de los sospechosos cargaba una bolsa plástica dentro de la cual los policías encontraron dos fusiles de asalto tipo AK, así como dos cargadores con municiones, todo lo cual fue decomisado.
Los delincuentes pertenecían a la banda delictiva “El Jobo” que el jueves 17 de enero del año 2019, asesinaron a balazos a los policías José Luis Montenegro Masís, Karina Vanesa Ramírez, Jonathan de Jesús Narváez Rivas y Carlos Iván Tenorio Obando.
La banda se dedicaba a cometer delitos de asalto, narcotráfico y abigeato, desde su base en Costa Rica.