A punto de morir estuvo Marcos Antonio Baca Selva, de 30 años de edad, luego que por motivos desconocidos intentará suicidarse tragando un montón de pastillas para diferentes malestares.
Marcos Antonio habita en el barrio Sol de Libertad, y fue salvado de la muerte por médicos del hospital Alemán-Nicaragüense.
Por otra parte, en el hospital Lenin Fonseca fue atendido Norman Moreno Orozco de 20 años, del barrio Bello Amanecer, en Ciudad Sandino, quien resulto baleado en ambos pies y en el abdomen, en circunstancias que son investigadas por la policía.
Otro atendido en el mismo hospital es Lombardo Ezequiel Parrales Mercado, de 27 años, quien es cobrador de buses y fue agredido en el bahía de buses del siete sur, al resistirse a ser asaltado, resultando con la ñata fracturada.
En el Lenin Fonseca también fue atendido Eyner Anselmo Amador Alvarado, de 27 años, por trauma craneal severo al sufrir caída en el barrio Rubén Ulloa.
En ese mismo hospital fueron atendidos Cesar Antonio Mercado García, de 22 años, del barrio Naciones Unidas, quien fue baleado en el brazo izquierdo, y Bismark Contreras Molina, de 25 años, de Vista Hermosa, quien recibió un balazo en la espalda, ambos hombres en circunstancias que son investigadas por la policía.
En el hospital Lenin Fonseca también fue ingresado procedente de Ochomogo, Rivas, el niño Edwin Fabián Morales Zambrana, de once años, quien resulto con trauma craneal en accidente de tránsito.
Otra persona llevada al Lenin Fonseca es el joven Lenin Ariel Sánchez, de 26 años, del municipio de la Concha, en Masaya, a quien un compañero de trabajo conocido como como “El Chele”, le quebró el brazo izquierdo al darle con un garrote, solo porque se arrecho cuando le llamo la atención para que fuera ordenado en su pegue.
La agresión ocurrió en un tramo del mercado oriental, y se conoció que el tal “Chele” huyo del lugar, sin que hasta el momento haya sido capturado.