Los propietarios y trabajadores de tres puestos de ventas de comidas, cerca del cementerio de la bella ciudad de Granada, vivieron momentos de pánico, cuando unos cables de transmisión eléctrica de un poste, se incendiaron.
Los bomberos llegaron al lugar logrando sofocar las llamas y evitar que los negocios ardieran. El servicio de energía fue suspendido y las cuadrillas de Enatrel, repararon los daños y restablecieron el servicio.
Los bomberos precisaron que el origen del cortocircuito, fue por el recalentamiento de los cables que conectan a los medidores, ubicados en un mismo poste.