Pegando el grito al cielo de “arrecho” se encuentra Alejandro José Avilés, de 65 años, al descubrir que su vigilante Manuel de Jesús Mayorga, se le peinó 50 gallinas ponedoras de su pollera ubicada en el reparto Tomás Borge, en la ciudad de León.
Don Alejandro relató que al llegar a la pollera, su vigilante Manuel Mayorga brillaba por su ausencia y ya no estaban ni las plumas de sus gallinas, por lo que se traslado a interponer la denuncia a la estación policial.
“Le dije que me cuidara bien mis gallinas, no que se las robara”, decía una y otra vez don Alejandro en la estación policial, mientras les pedía a los agentes que dieran con el paradero del delincuente.