La señora María Sebastiana Pérez, de 60 años, falleció después de tomarse varias “semillas” del insecticida-nematicida Furadán, en su vivienda ubicada en la comarca El Bejuco, de San José de los Remates, Boaco.
Doña María fue encontrada vomitando por sus familiares quienes la llevaron de urgencia al centro de salud de la comunidad, en donde expiró poco después por intoxicación, según el médico forense Denis López.
De acuerdo a familiares de doña María “Tana”, ella tomó la fatal decisión de acabar con su vida después de decir en varias ocasiones que se sentía sola.