Por lo menos 30 personas, entre ellos 7 bomberos, resultaron afectados al mediodía de este viernes, al ser atacadas por abejas africanizadas que tenían su panal entre las cortinas metálicas de una empresa distribuidora de llantas en el costado Oeste del edificio Armando Guido, en el barrio San Luis Sur, en Managua.
Supuestamente las abejas asesinas salieron al ataque después de que alguien remeció las cortinas metálicas, alborotando a los feroces insectos, que empezaron a piquetear a las personas que iban circulando por la zona.
Trabajadores de una empresa de servicios médicos ubicada en las cercanías relataron que al momento del ataque, un motociclista y varios conductores de autos que esperaban el cambio de luz en el semáforo se vieron obligados a abandonar sus vehículos y salir corriendo para ponerse a salvo de las peligrosas abejas.
Tras el llamado de auxilio de personas que viven o laboran en el sector, al lugar llegaron compañeros de los Bomberos Unificados de Nicaragua, siendo recibidos por las abejas que mandaron piqueteados a siete bomberos al centro de salud Francisco Buitrago.
En otro caso similar, el señor Luis Guillermo Vásquez Martínez, de 72 años de edad, fue trasladado en condiciones delicadas de salud al hospital Alemán Nicaragüense, después de haber sido atacado por un enjambre de abejas africanizadas en el barrio Las Torres, de Managua.
Se conoció que el señor Vásquez estaba sentado en el patio de su casa cuando un grupo de chavalos vagos apedreó el panal de abejas que estaba en un árbol, provocando que los insectos salieran al ataque y se ensañaran contra el anciano, provocándole problemas de respiración.
Las abejas africanizadas o abejas asesinas son híbridos procedentes del cruzamiento de la subespecie natural africana con abejas domésticas pertenecientes a varias subespecies.
La particularidad de estos híbridos es su acentuado comportamiento defensivo, describiéndose como muy agresivos ante molestias. Su piquete puede provocar shock anafiláctico y en caso de que la persona sea alérgica, puede causarles hasta la muerte.
Las abejas asesinan atacan en cantidad, muy velozmente y siguen a su víctima hasta a 400 metros de su colmena o enjambre. Este comportamiento ha provocado las muertes de alrededor de 1.000 personas en Estados Unidos con diez veces más picaduras que las de abejas comunes.