– Controlarse la presión.
– Evitar fumar o beber.
– Consumir alimentos sanos.
– Reducir el nivel de grasas (si bien muchas es difícil evitar consumirlas, se debe tratar que sea de forma reducida y así evitar el colesterol elevado y los triglicéridos).
– Realizar algún deporte, el ejercicio es muy beneficioso para las enfermedades cardiovasculares pues ayuda a disminuir la presión arterial y a bajar el colesterol malo.
Cabe resaltar que en este tipo de accidentes, el tiempo es vital, pues mientras más dure el ataque, mayor será el daño ocasionado. La atención inmediata puede salvar la vida de la persona y aumentar sus posibilidades de una recuperación exitosa.