La ansiedad es un mecanismo de defensa del cuerpo humano para enfrentar la amenazas y generalmente mejora la capacidad de respuesta y mejora el rendimiento ya que su función es mantener alerta el organismo frente a riesgos y amenazas.
Sin embargo este mecanismo de defensa a veces actúa de manera desproporcionada y provoca problemas de salud y nos incapacita en vez de ayudarnos.
Es por eso que debemos tomar ciertas medidas para que no nos afecte.
Los hábitos alimenticios
El ritmo de vida moderno provoca que nuestros alimentos no sean los más saludables es por ello que debemos llevar una nutrición variada y se recomienda comer en pocas cantidades unas 5 veces al días. De esta forma evitaremos los problemas estomacales.
Practicar deporte
El ejercicio físico es un gran aliado para combatir la ansiedad ya que tonifica nuestros músculos para que no queden rígidos y que nuestro sistema nervioso no este alterado. Luego de una actividad física nos sentimos bien y cansados por lo que conciliamos el sueño más fácilmente.
Tiempo a las tareas
Es común la sensación de que el tiempo esta en nuestra contra y que nunca podemos realizar nuestras tareas provocando que nuestros niveles de ansiedad aumenten. Debemos encontrar el tiempo necesario para comer siempre sentados, salir de la casa a tiempo para llegar puntual a nuestras reuniones o el trabajo.
Empezar y Acabar
La frase «No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy» es un sabio consejo para evitar la ansiedad. Si disponemos de tiempo para concluir una determinada actividad es necesario que la culminemos, ya que nuestro cerebro generará una sensación de ansiedad al tener una tarea pendiente.
Nuestros Tics
Las personas que sufrimos ansiedad la canalizan a través de movimientos corporales involuntarios y repetitivos como jugar con algún objeto entre las manos, mover los pies o caminar de un lado a otro en una habitación. Debemos controlar estos tics y respirar profundamente, detenernos y realizar otra actividad para mejorar el autocontrol.
Delegar y negarse
Es importante saber que todo en la vida tiene un límite físico y mental por eso debemos en muchos casos delegar o negarnos a hacer ciertas tareas que sabemos que no las podemos realizar por falta de tiempo o de recursos.
Tiempo para uno
Es importante invertir tiempo en uno mismo, disfrutar de una vida social, tener un hobby, salir a pasear ya que estas actividades reducen los niveles de ansiedad.
Relajarse
Relajar nuestros músculos con ejercicios, yoga o tai chi y además de saber controlar nuestra respiración nos ayudará a controlar la ansiedad y podremos manejar mejor las situaciones que nos provocan estrés.
Dormir bien
Las preocupaciones y el ritmo de vida son nuestros principales enemigos a la hora de dormir porque ambos generan ansiedad. Debemos dormir el tiempo suficiente, evitar pensamientos que nos agobien y complementar el descanso con una buena alimentación saludable y ejercicio.