A las 6 de esta tarde de este lunes, luego de la solemne misa en saludo a los 76 años de devoción y penitencia a la Bienaventurada Nuestra Señora la Virgen de la Asunción, desde la Insigne y Real Basílica Catedral de León cuando se dé el grito de “¿Quién causa tanta alegría? ¡La Asunción de María!”, millares de nicaragüenses iniciaran la tradicional “gritería chiquita” o de “penitencia”.
La gritería chiquita fue instaurada en 1947, según la historia los pobladores de León, junto a su obispo, Augusto Isidro Oviedo y Reyes le rogaron a la Santísima Virgen María que calmara la actividad eruptiva del Cerro Negro, que luego de varios días cesó de lanzar nubes de ceniza que oscurecían la ciudad y derribaron decenas de techos de humildes viviendas con techo de tejas.
Sorprendentemente la noche del 14 de agosto paró la erupción, los leoneses por fin terminaron con sus miedos y desde entonces ante este hecho catalogado de “milagro” cada 14 de agosto (víspera de la fiesta de la Asunción de la Bendita Virgen María) se celebra esta fiesta religiosa popular propia de Nicaragua.
Una de las características de La Gritería Chiquita es la persistencia de altares alusivos a la erupción del Cerro Negro, teniendo como centro la imagen de la Virgen.
Los leoneses junto a los centenares de visitantes se arrojan a las calles a gritar, recibiendo sus respectivas gorras, como dulces nacionales gofios, huevo chimbo, leche burra, cajetas y más.
La tradicional “Gritería Chiquita”, también se ha extendidos a otros departamentos como Masaya, Granada, Carazo, entre otras, donde igual que en la ciudad de León, la romería de devotos de la virgencita, salen a las calles para participar de la “Gritería de la Penitencia” a como también se le conoce.
Así que hoy las familias leonesas y de otros departamentos celebraran con fervor la tradicional “Gritería Chiquita” con el grito “¿Quién causa tanta alegría? ¡La Asunción de María!”.