En el contexto del cuarto domingo de Pascua, el Cardenal Leopoldo Brenes, celebró junto al pueblo nicaragüense el Domingo del Buen Pastor, en la Catedral Metropolitana de Managua.
El líder religioso explicó que Nicaragua ya tiene una tradición de más de cincuenta años celebrando el Domingo del Buen Pastor, en la cual se pide a los feligreses que oren por los sacerdotes de buen corazón.
Tras la santa misa, el Cardenal Brenes, se refirió sobre los efectos del cambio climático y sus consecuencias en la salud humana y el deterioro de los recursos naturales.
“La naturaleza no perdona, le cuesta a la naturaleza perdonar, porque la estamos violentando”, dijo el líder católico poniendo como ejemplo que le da mucho pesar el caudaloso Río de Matagalpa y el caudaloso Río Coco, que están quedando secos.
El Cardenal Brenes indicó que a causa del calentamiento global, también se están incrementando los calores en todas las zonas del país.
“Jinotega que antes era la Ciudad de las Brumas, ahora es la ciudad del calor. La temperatura casi llegaba a los 40 grados, y esto es peligroso, porque trae muchos infartos y también trae otras clases de enfermedades”, dijo Brenes.
El Arzobispo de Managua, explicó que, en este sentido, tenemos que hacer todos un ejército con nuestras voces y testimonios, para que la Madre Tierra y la naturaleza misma no siga siendo violentada.