«Nicaragua es uno de los países que mayor evolución ha tenido en cuanto a la conservación de las tortugas marinas, de hecho, todas las especies son prioritarias», asegura el especialista en medio ambiente, Norwin Tórrez.
El ecologista detalló que hay un trabajo interinstitucional articulado en Nicaragua y es uno de los mejores en Centroamérica, que ha logrado reducir en un 80 por ciento el consumo de huevos de tortugas.
También el gobierno de Nicaragua tiene la mayor inclusión de tortuguillos marinos y con tendencia al crecimiento del número de arribadas en las playas del pacífico y del Caribe Nicaragüense.
El trabajo de conservación es integral, el gobierno toma en cuenta a las autoridades locales, para evitar el consumo de huevos y el tráfico de tortugas marinas y sus derivados, refirió Tórrez.
Hay viveros en toda la franja del pacífico de diversas nomeclaturas, se protegen las tortugas de arribadas masivas y solitarias, el gobierno no discrimina entre una especie y otra, declaró el experto en medio ambiente, Norwin Tórrez.