En los próximos dos años se desarrollará en Nicaragua un programa de reducción de emisiones por deforestación y degradación forestal con la coordinación del Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARENA) con el apoyo del Banco Mundial.
El director del Banco Mundial para Centroamérica, Humberto López, expresó “para nosotros es un gran placer firmar esta carta de intención porque contribuiremos a la reducción de 11 millones de toneladas de dióxido de carbono, lo que contribuirá a los esfuerzos para enfrentar el cambio climático”.
La compañera Juanita Argeñal, representante de Marena, destacó que este programa se expandirá en la costa Caribe Norte y Sur, en los municipios matagalpinos de El Cua y La Dalia, y en la Reserva de Biosfera de Bosawás y la Reserva Biológica Indio Maíz.
De lograrse la cifra de reducción de dióxido de carbono, Nicaragua podría recibir 55 millones de dólares en concepto de pagos de resultados.