El presidente del Partido Unidad Cristiana, Reverendo Daniel Ortega Reyes, dijo que el triunfo de la Revolución Popular Sandinista el 19 de Julio de 1979 no solo puso fin a un régimen opresivo, sino que dejó una sociedad en avance, con programas para combatir la pobreza.
El también diputado por Nicaragua ante el Parlamento Centroamericano (PARLACEN), recordó que el triunfo del pueblo fue abonado con miles de vidas de hermanos nicaragüenses que lucharon contra más de 15 mil guardias que el régimen somocista entrenó para reprimir de forma atroz al pueblo.
Añadió que ahora las familias nicaragüenses tienen un pensamiento más progresista, y no van a permitir nunca que vuelva una situación como ésa.
“Esas fuerzas extrañas desaparecieron del país para siempre, fueron enterradas con el mismo lenguaje de las armas que Somoza usó contra el pueblo”, valoró.
Explicó que posterior a ese triunfo la reconciliación nacional comenzó a caminar de la mano de las conquistas de la revolución. En ese sentido, mencionó que con el regreso del Frente Sandinista al poder en el año 2007, es evidente la articulación y el caminar en unidad con el Gobierno, el Pueblo y la Iglesia.
«Esta es una tarea que la estamos implementando uno a uno, familia a familia», afirmó Reyes, quien considera que ahora con el Gobierno del Comandante Daniel se vuelven a levantar las banderas de Paz y armonía.
El líder del PUC, señaló que la Revolución del 79 no fue para traer gobiernos democráticos al estilo imperial, ni para crear una sociedad democrática de corte imperial.
«La Revolución dejó una sociedad en avance, con programas de educación y de desarrollo para combatir la pobreza y la extrema pobreza», aseguró.
El reverendo Ortega Reyes valoró que 37 años después, ese triunfo del pueblo debe celebrarse con fe, con lucha, alegría y en determinación de no dar un paso atrás, sino ir adelante y no regalar las conquistas de la revolución, más bien deben seguirse fortaleciendo en todo su esplendor.