Centenares de devotos compraron diversos productos de la tradicional gorra para celebrar hoy la «Gritería Chiquita» o «Gritería de Penitencia» en honor a la Asunción de la Santísima Virgen María, una fiesta religiosa que se realiza cada 14 de agosto en Nicaragua.
En el mercado Roberto Huembes, uno de los más grandes y concurridos de la ciudad Managua, se ofrecen los dulces y accesorios típicos de la Virgencita tales como las muñecas, los indios, las paletas, los churros y los gofios.
María Guevara, dueña del tramo “Chilo, La Negrita”, dijo que hubo una buena venta desde el fin de semana y hoy lunes, de los devotos que celebran la Gritería Chiquita. Según ella, los precios son accesibles y hay variedad de productos.
Entre los productos más buscados para la gorra están los churritos de 100 unidades a 50 córdobas; los gofios y las cajetas de coco, de leche y de coyolito, a 90 córdobas la docena; las paletas, a 100 córdobas la docena; los caramelos rayados, a 50 córdobas los 100; las trocantes, a un córdoba por unidad; el pinolillo, a 80 córdobas la libra; y las rosquillas y viejitas, desde 50 córdobas las bolsitas.
También se venden las muñecas tradicionales de la Virgen María, a 110 córdobas cada una. Estas muñecas son elaboradas con tela y relleno, y llevan un vestido blanco con detalles azules y una corona dorada.
La Gritería Chiquita es una manifestación de fe y devoción a la Virgen María, que se celebra en Nicaragua desde el año 1947. Consiste en cantarle a la Virgen en las casas y en las iglesias, y recibir una gorra con dulces y otros obsequios.
Esta Gritería se celebra en conmemoración de la peregrinación que realizaron los leoneses en 1947, organizada por el obispo Isidro Augusto Oviedo y Reyes, para rogar a la Asunción de la Virgen que detuviera una violenta erupción del volcán Cerro Negro.
Increíblemente la noche del 14 de agosto de 1947 paró la erupción y los leoneses por fin dejaron de sentir miedo y desde ese día, ante este hecho catalogado de milagro, se celebra La Gritería Chiquita.
Esta festividad originada en la ciudad de León, pero que hoy se celebra en diferentes partes del país, es llamada así, para no confundirla con la “Gritería Mayor”, que se celebra cada 7 de diciembre en toda Nicaragua, en honor a la Inmaculada Concepción de María.
La tradicional celebración religiosa de la “Gritería Chiquita” está cumpliendo 76 años.