El Presidente de la República, Comandante Daniel Ortega Saavedra, y la Vicepresidenta Compañera Rosario Murillo, sostuvieron un fraternal encuentro con una delegación de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, encabezada por el élder Ronald A. Rasband, miembro del Quórum de los Doce Apóstoles.
El élder Rasband estuvo acompañado de su esposa, Melanie Rasband; miembros de la delegación de la Iglesia Mormona en Utah, élder Craig Christensen, élder Kevin Duncan, élder José Maravilla; y representantes de la Iglesia en Nicaragua, Nelson Edy Cortes y Julio Alvarado.
Durante el encuentro el Comandante Daniel se mostró interesado en conocer la historia del surgimiento de la iglesia mormona y tras escucharla aseguró que los miembros de esa iglesia son mensajeros de la Paz.
«Ustedes son mensajeros de la paz, que tanta falta hace en el mundo», aseguró Daniel.
«En Nicaragua nos ha costado mucho también alcanzar la Paz. En la última etapa de guerra aquí en Nicaragua, al final para alcanzar la Paz se formó una Comisión de Reconciliación y Paz y ahí se involucraron delegados de la Palabra de la Iglesia Católica, y pastores de todas las iglesias, y claro que ahí estaban los pastores participando en ese proceso de Paz, visitando casa por casa en los municipios, en las pequeñas comunidades, en las zonas de guerra a los que habían combatido para que no tuvieran temor de llegar a la Paz», relató.
El presidente manifestó que los pastores y delegados de la palabra fueron determinantes para llegar a las familias en sus territorios e ir acercando a las familias y a los combatientes hacia la Paz.
«Y hemos logrado cuidarla, y todos ellos ayudan mucho en la lucha por la Paz aquí en Nicaragua», valoró.
«Y por eso nosotros valoramos mucho lo que significa el esfuerzo que ustedes han hecho en nuestro país y que continúan haciendo, que es fortalecer el Espíritu. Si no se fortalece el espíritu, entonces nos complicamos y son tantos los desafíos, tantos los retos donde el mejor medio de comunicación para llegar a las familias no es la radio, no es la televisión, es el pastor que está ahí en la comunidad que le puede trasladar a las familias ese mensaje», añadió.
El Comandante también indicó que ahora otros retos se enmarcan en la lucha contra el narcotráfico que amenaza a las familias y a la juventud.
«Y ahí las familias se han convertido en una fuerza muy importante para contribuir a combatir la distribución de la droga en los barrios, en las comunidades. Pero claro, el mensaje que llega primero a las familias es el mensaje, la palabra de Dios, eso es lo primero que llega para que coja fortaleza para librar esta lucha», afirmó.
Daniel también señaló que existen otros desafíos en el país en los campos de la salud, la educación, la atención a la niñez.
“Son grandes retos, grandes desafíos, la protección de la vida de los niños, todos estos son compromisos que hemos asumido y donde nos sentimos más alentados en la medida que tenemos el acompañamiento de todas las iglesias. En particular ustedes tiene un compromiso con la paz, más aún con ese antecedente que me están describiendo hoy ustedes, que no tenía idea. Ustedes fueron perseguidos, entonces saben lo que significa el dolor, el sacrificio, y lo que vale luego alcanzar la reconciliación y la paz”, indicó el Comandante, tras escuchar un repaso de la historia y las dificultades vividas por la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en sus inicios.
Los primeros mormones que llegaron a Nicaragua navegaron por el Río San Juan
Tras escuchar la historia del surgimiento y persecución de la Iglesia Mormona en Estados Unidos, y conocer que los primeros mormones tuvieron que emigrar hacia la Costa Oeste de esa nación, el Presidente Daniel explicó que probablemente los primeros mormones llegaron a Nicaragua y cruzaron la ruta de tránsito por el Río San Juan para cruzar al oeste.
«Todos los días se aprende, estoy aprendiendo. Desconocía totalmente esa parte de la historia de Estados Unidos y seguramente algunos miembros de su Iglesia, ya en los años 1852 – 1853 se trasladaron de la Costa Este, hacia la Costa Oeste, pasando por Nicaragua, o pasando por Panamá, porque como la ruta era tan riesgosa por tierra, es decir avanzar de una costa a otra costa por tierra, lenta y muy peligrosa, había resistencia indígena todavía, habían asaltantes, delincuentes y luego zonas desérticas, inhóspitas», explicó.
«Entonces un empresario norteamericano, Vanderville, dueño de empresas navieras organizó una ruta de tránsito donde era más seguro, más rápido venir de la Costa Este de los Estados Unidos embarcado hacia la Costa Este de Nicaragua. Aquí desembarcar a los pasajeros en la zona del Caribe en el Río San Juan, luego navegar por el Río San Juan hacia el Lago y del lago ya quedaban nada más 14 kilómetros de tierra para llegar al pacífico, y entonces la empresa de tránsito ahí tenía una diligencia para trasladarlos. Ahí los esperaba otro barco de mayor calado y ya ibas hacia la Costa. Así pasaban por Nicaragua miles de norteamericanos e incluso se quedaron en Nicaragua», comentó.
Líder trae los mejores deseos y buena voluntad de su iglesia a nivel mundial.
El élder Ronald A. Rasband, Apóstol de la Iglesia Mormona, manifestó que la visita fue «para venir y conocerle y traerle nuestros mejores deseos y nuestra buena voluntad de nuestra iglesia mundial. ¡Y cuánto apreciamos la larga relación que hemos tenido con las personas de su país!”.
El Apóstol Rasband repasó la historia de la Iglesia Mormona en Nicaragua, destacando que vino por primera vez a Nicaragua en 1950. «Hemos estado en los altos y bajos del país, también estuvimos en la tragedia natural, estuvimos aquí para apoyarles y ahora tenemos más de 100 mil miembros de nuestra iglesia y 75 diferente congregaciones con iglesias capillas en su país”.
«Como ustedes saben, esto requiere una inversión significativa sólo para poder construir esos edificios, así sentimos que hemos invertido en su país. También sentimos que hemos invertido con sus ministros en los diferentes programas de la familia, la salud y la educación y esperamos poder seguir contribuyendo a lo largo del futuro con su pueblo», aseguró.
Rasband explicó que Utah es la sede central para la Iglesia Mormona.
«Yo nací en 1951 en Utah. La Iglesia se inició en la parte alta del estado de New York, en 1820 y desde entonces ha crecido hasta convertirse en una iglesia mundial. Tenemos 16 millones de miembros de la iglesia, pero más de la mitad de estos 16 millones de miembros hablan español como lengua materna. Así que el crecimiento de nuestra iglesia en América Latina ha sido más grande que en cualquier otra parte del mundo», comentó.
El líder relató que en los primeros días su iglesia fue perseguida. «Mis antepasados estuvieron entre estos primeros miembros de la iglesia y los miembros de la iglesia, los líderes y la iglesia como organización fueron perseguidos desde el lado Este, hasta que llegaron al estado de Utah, para poder buscar la libertad religiosa».
«La persecución vino porque nosotros somos una iglesia que dice que Dios el Padre y Jesucristo pueden aparecérsele al hombre en nuestros días. Como ve, no somos una iglesia católica, tampoco somos una iglesia protestante, somos lo que nosotros llamamos una iglesia restaurada. Nosotros creemos sí, es muy bondadoso que usted pueda preguntarnos, nosotros creemos que Jesucristo mismo restauró la iglesia que Él organizó cuando Él vivió sobre la Tierra. Así que algunas de las otras iglesias nos perseguían a nosotros por estas creencias. Y algunos de los líderes gubernamentales se unieron a ellos en esta persecución», expuso.
El élder Rasband también relató que su iglesia fue fundada por el profeta José Smith, quien fue martirizado por sus creencias; y el segundo profeta de su iglesia, Brigham Young, fue el colonizador de Illinois, cuando Utah era parte del territorio mexicano.
«Así que nuestra iglesia fue obligada a salir de los Estados Unidos de Norteamérica, pero rápidamente creció y eventualmente Utah llegó a ser parte de los Estados Unidos de Norteamérica. Y Brigham Young se convirtió en el primer gobernador del Estado de Utah. Los gobiernos de los estados que le habían perseguido antes pidieron perdón públicamente y el gobierno de Estados Unidos también se disculpó públicamente. Y de ahí en adelante la iglesia comenzó a crecer y a prosperar. La reconciliación fue alrededor de 1880. Así que por los primeros 40 ó 50 años tuvimos un inicio muy tormentoso», valoró.
El líder mormón dijo que actualmente la iglesia tiene buenas relaciones con el gobierno de Estados Unidos, tiene miembros en el Congreso «y somos muy bien respetados no sólo en Estados Unidos, sino por todo el mundo y esperamos que también en Nicaragua sea así».
Relación maravillosa con Nicaragua
Rasband también dijo que es probable que algunos de los primeros miembros de su iglesia realizaran el viaje hacia el Oeste a través de Nicaragua, por lo que posiblemente muchos se quedaron en el país.
«Así al llegar a los 1950 teníamos suficientes miembros que ya vivían aquí en Nicaragua, que en 1954 la Iglesia se organizó formalmente aquí en Nicaragua y desde entonces hemos podido disfrutar de una relación maravillosa acá en su país. Ahora nos sentimos como socios completos con algunos de sus ministerios y de sus agencias. Ya estamos trabajando juntos con ellos para el mejoramiento de su gente», afirmó.
Rasband recordó que sus ancestros dieron sus vidas para la protección de la libertad religiosa.
«Yo siento que puedo decir que por las acciones de nuestra iglesia en su país y lo que hayamos hecho, en el pasado ustedes pueden predecir qué es lo que podemos hacer por ustedes en el futuro. Usted mencionó cuán importante es la paz para usted, nosotros queremos que usted sepa que nosotros servimos al Príncipe de Paz, el Señor de Señores, el Rey de Reyes, Jesucristo», expresó.
El élder entregó al Presidente Daniel y a la Compañera Rosario una pequeña estatua de Jesucristo «como un recordatorio de nuestra visita con usted hoy y también un recordatorio de la paz que nosotros deseamos para su país».
El élder y su esposa invitaron al Comandante Daniel a visitar Utah y conocer un poco más sobre la iglesia mormona.
Al finalizar el encuentro, algunos miembros de la delegación de la iglesia Mormona desearon al Presidente muchas bendiciones para que continúe dirigiendo el país.
«Siento que Dios lo puso en este trabajo para ayudar a mucha gente. Siento su espíritu que puede ayudar a tanta gente», dijo una de las miembros de la delegación que se identificó como procedente de Monterrey, México.
«Es un placer para mí conocerle, estrechar su mano y rogar las mejores bendiciones de Dios para usted, para que pueda continuar dirigiendo nuestro país y sepa que estamos para servirle y apoyarle y sostenerle como Presidente de la República», expresó uno de los miembros de la delegación nicaragüense.