A un costo de 68 millones de córdobas, la magistrada Alba Luz Ramos Vanegas, presidenta de la Corte Suprema de Justicia y el magistrado Gerardo Arce Castaño, inauguraron el nuevo Complejo Judicial Departamental de San Carlos.
El moderno edificio fue construido con fondos del Presupuesto General de la República y durante la inauguración, la presidenta de la Corte instó a los funcionarios a “mantener y mejorar la actitud de servicio a los usuarios de la justicia”.
Con estas construcciones, “estamos contribuyendo a hacer más imparcial al Poder Judicial, a disminuir la retardación de justicia, aumentar la seguridad jurídica, facilitar el acceso a la justicia, mejorar el desempeño administrativo y modernizar la infraestructura, cumpliendo así con los seis ejes de nuestro plan estratégico decenal”, manifestó la presidenta del Poder Judicial.
Nicaragua ha transformado la administración de justicia, aprobando leyes y códigos e introduciendo nuevas tecnologías de la información y comunicación, especialmente para implantar el nuevo modelo de gestión de despachos judiciales, dando transparencia a los procesos, destacó la doctora Ramos Vanegas.
Nicaragua es el único país de Centroamérica con oralidad en todas las materias del Derecho, subrayó.
Recordó que “la reforma penal fue lo primero, ya que contábamos con un sistema escrito, inquisitivo y repetitivo; los juicios penales con el código de instrucción criminal duraban tres años cuando menos, decidimos hacer la reforma porque el sistema estaba colapsado y la retardación de justicia era terrible”.
La presidenta de la CSJ dijo que cuando en el Tribunal de Apelaciones de Managua existía una sala de lo penal y se discutía sobre crear una segunda, los magistrados en ese entonces decían “que ni se crearan tres salas se podía salir de la retardación de justicia”, pero “gracias a Dios salimos de esa realidad y hoy en día hemos eliminado la retardación de justicia en la capital”.
Explicó que desde que se implementó la oralidad en lo penal, los procesos se tramitan con mayor transparencia y el juez ya no tiene que dar audiencias privadas a las partes porque ahora son orales y públicas.