La Compañera Rosario Murillo, Vicepresidenta de la República, dijo que el mayor deseo, aspiración y compromiso de los nicaragüenses es que avancemos en la recuperación de la seguridad, la paz, la tranquilidad y la capacidad de trabajar y prosperar.
“Yo le hablo a las madres, le hablo a la juventud, le hablo a las abuelitas y a los abuelitos y les digo: Aquí estamos comprometidos con ustedes en la voluntad, el deseo, la aspiración de paz, de tranquilidad y sobre todo en la búsqueda de afianzar ese derecho, porque es derecho humano esencial, la paz, la vida, el respeto a la vida, el respeto al derecho de trabajar, el respeto al derecho de estudiar, el respeto al derecho de promover salud y vivir con salud, con optimismo, con confianza, desde la fe, por supuesto, nosotros como pueblo cristiano, como familias cristianas”, afirmó.
Resaltó que en Nicaragua sabemos que estamos en las manos de Dios y por ello es que humildemente le clamamos por la paz y los valores de familia y así no seguir sufriendo tantas pérdidas y dolores.
“Que ninguna madre, que ningún abuelo, ningún hermano tenga que sufrir la pérdida de ningún ser querido, ninguna esposa, compañera o esposo o compañera, ningún hijo o hija tenga que quedarse sin sus padres, clamamos a Dios por la paz, por la familia, por la juventud, por los niños, por esta Nicaragua de vigor y de gloria, como decía Darío que recupera que vigor, que no ha perdido su vigor y sobre todo espiritualmente”, aseguró.
La Compañera Rosario Murillo manifestó que cada día en la medida en que estamos en las manos de Dios sentimos el alma fortalecida “porque sabemos que desde la fe todo es posible y que desde la fe, desde el buen corazón, desde la buena esperanza y unidas todas las madres y unidas todas las familias y unida toda la juventud y unidos todos los que queremos el bien, todos los que queremos capacidad de amor, todos los que rechazamos, que repudiamos el odio, todos los que nos sentimos en capacidad de ver en el otro al hermano, de perdonarnos, de reconciliarnos, de encontrarnos”.
“Todos queremos la paz, queremos el diálogo y queremos trabajar juntos, escucharnos, discutir todos los temas porque para todo hay solución, solo para la muerte no hay solución, entonces evitemos más sufrimiento, evitemos más muertes, evitemos más dolor, no a la muerte, no a la destrucción, no a la violencia. Respetémonos, unámonos en oración ante el Señor y pidamos que el corazón se nos llene de amor, de responsabilidad y que uniendo manos y almas en compromiso absoluto de vernos como prójimo, como familia, en amor, vayamos adelante”, enfatizó la vicepresidenta.