La Vicepresidenta, Compañera Rosario Murillo destacó este viernes que hoy por hoy Nicaragua se reanima, se recupera, restaura su rumbo, “buenos rumbos, en cristianismo, en familia, en socialismo, en solidaridad”.
No obstante, denunció que enemigos de la paz y el trabajo son los que, desde la comodidad, el confort de sus casas de sus oficinas, “esos viajes frecuentes que hoy se disputan, son otro negocio y viajan precisamente para tratar de seguir denigrando a nuestra Nicaragua y seguir mostrándose como enemigos de la paz y el trabajo”.
Dijo que solo ellos, los puchos, los chingastes, la poquedad, como dice la gente, siguen apostando, siguen planificando inestabilidad, dificultades, “ellos los que han promovido y financiado las acciones del golpe clasista, terrorista y criminal, el golpe sacrílego, hablando en nuestros términos de pueblo de fe, pecaminoso, golpe contra los pobres, contra la mayoría que luchan por salir de la pobreza y contra un gobierno que les respalda”.
El gran pecado: apoyar a los pobres
Murillo señaló que el pecado de este gobierno es haber apoyado a los trabajadores, a las familias trabajadoras, a pobres, “y entonces urden un golpe que ese es el verdadero pecado, el sacrilegio contra los pobres”.
Dijo que todas las instituciones de servicio al pueblo, es ese mismo pueblo que sabe quién destruyó sus ambulancias, sus centros de salud, sus hospitales, sus escuelas, sus centros tecnológicos, sus universidades, sus calles, sus carreteras, sus instituciones de servicio, sus viviendas, sus negocios.
“El pueblo sabe quién los destruyo, por eso decimos nosotros: Dolor para un pueblo que siempre llorará sus muertos y vergüenza para ellos los destructores. Un dolor que clama justicia, la gente quiere justicia. Un dolor que ahí está de manera permanente en el corazón de las familias que perdieron seres queridos y en toda Nicaragua, pero clamamos justicia y derechos humanos para todos. Justicia y paz».
Señaló que hay quienes siguen atentando contra la paz y el trabajo, desde su comodidad, esa comodidad que en nada les fue afectada porque parapetados detrás de sus siglas, ellos son los responsables de haber querido la ruina de los pobres.
“Y el reino de los pudientes. Es decir, el reino de los pobres y los luchadores y el reino de los pudientes. Y ese no es el Reino de Dios en la Tierra, ese es un pecado capital, atentar contra los pobres y contra todos los programas de lucha contra la pobreza, es un pecado capital”, subrayó.
Agregó “vergüenza debe darles y al pueblo dolor, por todas esas tropelías cometidas contra las familias trabajadoras. Vergüenza a ellos y dolor por los muertos, nuestros muertos, por todas las pérdidas que sufrimos. Vergüenza para ellos y dolor para el pueblo, dolor que se va superando, dolor que se ha convertido en fuerza que nos moviliza hacia delante. Vergüenza para ellos por haber apostado perversamente a la destrucción de Nicaragua. Vergüenza porque se movieron con perversidad por intereses políticos egoístas. Vergüenza porque golpearon la Patria, porque no parece anidar en ninguno de ellos, un corazón amoroso que quiera el bien para Nicaragua y para las familias luchadoras de nuestra Nicaragua. Vergüenza por los crímenes cometidos, vergüenza, vergüenza. Vergüenza, para ellos, dolor para el pueblo, que gracias a Dios ya viene recuperándose, reponiéndose, con una fuerza infinita, con la conciencia clara de quien quiso arrebatarles y quien les arrebato durante tres meses el derecho al trabajo, el derecho a la vida, el derecho a la paz”.
Hizo énfasis que cómo podemos reconocer a los desalmados, “gente sin alma que no piensa en los demás, que no son cristianos, que no son creyentes. Ahora todos somos cristianos y no pensamos en el pobre, no pensamos en los demás, no piensan ellos, los destructores. Ellos la poquedad no piensan en los demás, en las mayorías, que luchan, que sufren, que han tenido pérdidas de todo tipo, cómo les quemaron viviendas, le saquearon viviendas, le saquearon negocios, pequeños negocios a las mayorías, que fueron asaltadas por la poquedad. Vergüenza para ellos, dolor para un pueblo que siempre llorará sus muertos. Vergüenza para los que siguen o pretender seguir atizando el fuego ahora desde otros países, porque aquí ni pudieron, ni podrán”.
La Vicepresidenta explicó que ellos piensan que Nicaragua es su finca y que los nicaragüenses somos los mozos, los peones.
Dijo que vergüenza para ellos, los corrosivos, que todavía creen que todavía creen que pueden golpear el alma nicaragüense. Porque movilizan plataformas mediáticas internacionales de medios que le sirven a los imperios y se llenan de mentiras, calumnias, infamia, distorsiones intencionadas, noticias falsas.
Trajo a colación el caso de una noticia publicada un día de estos en una cadena internacional, donde una movilización del pueblo sandinista, una movilización multitudinaria, la quisieron hacer pasar por marchas de siglas, de chingaste, de esa poquedad.
¿Quién les cree?
“Nicaragua entera los repudia, los rechaza y esa patraña, ¿Esa noticia falta quien la cree? El que está aquí sabe que no mueven a nadie, que son la poquedad, versus la mayoría del pueblo trabajador potente que quiere seguir avanzando, que quiere seguir luchando por la justicia y la paz, desde un trabajo honrado que representa la posibilidad de seguir llevando el sustento a las familias, el pan nuestro de cada día a su familia, a sus hijos y hacerlo todos los días en paz. No pudieron ni podrán, nosotros somos el pueblo de Darío y Sandino, y llenos de fe, de amor, el corazón lleno de esperanza, seguros de quienes somos, seguros de nuestra historia, de nuestro legado y seguro de nuestra potencia espiritual. Y hemos declarado que somos libres y que jamás volveremos a ser esclavos”.
Hizo énfasis que de nada les van a servir esas infamias, mentiras repetidas y repetidas por sus contactos internacionales. Son Fake News, noticias falsas todos los días, la verdad como el amor es más fuerte que el odio y la mentira.
“Estamos seguros el mundo despertará a la realidad de un pueblo que no merecía la infamia de los que hoy se retuercen, esos que se están cociendo en su propio bochorno. No pasaron, no pudieron, no pasarán y no podrán. Tenemos alas de fe y esperanza. Y vamos clamando con Darío, Paz, Paz, Paz, y todos sabemos que la paz es fruto de la justicia, los crímenes cometidos por la poquedad, por los financieros, los financistas de la poquedad no quedarán impunes. Ni la calumnia, ni la difamación, ni el desprestigio, el afán de desprestigiarnos, ni la artificiosa y falsa ola mediática internacional podrá denigrar a nuestro pueblo, que lleno de amor Patrio, autoestima y reconocimiento de nuestro poder espiritual, sabemos que todo es posible es Cristo que nos fortalece. Y como cristianos, como creyentes, como pueblo soberano, digno, de fe, pueblo de Dios vamos adelante por muy grande que se presente el desafío, Dios es más grande y el plan de Dios para Nicaragua que nosotros conocemos es que vamos a restaurar”.
La compañera Rosario reiteró su compromiso de seguir restaurando el amor, la convivencia y las rutas de trabajo honrado para consolidar justicia, la paz, el buen rumbo económico que se va a ir restableciendo, que se va a ir restaurando, porque esa es la voluntad de Dios y es la voluntad del Pueblo.
“Nosotros sabemos que la verdad va a vencer a la mentira y muchos de los que hoy se unen en la falsificación y el sabotaje mediático contra nuestro país, dejarán de hacerlo porque no hay mentira que se sostenga, como no hay mal dure, como no hay odio que pueda clamar aquí victoria, no hay odio que pueda victoria”.