El Presidente de la República y Secretario General del Frente Sandinista, Comandante Daniel Ortega Saavedra, participó este jueves en la clausura del Grupo de Trabajo del Foro de Sao Paulo, que se desarrolló durante esta semana en la ciudad de Managua.
En su mensaje a los delegados, el Comandante recordó que en el año 1980, después del triunfo de la Revolución Sandinista, viajó a Sao Paulo, Brasil, donde fue recibido por el ex presidente Lula Da Silva, Fray Betto y el Cardenal Evaristo Arns. Dijo que en esa ocasión los militares recién habían destruido la universidad católica, y que todo era un campo de batalla humeante por la represión contra los trabajadores, los campesinos, la juventud y los estudiantes.
Indicó que esa batalla se libraba en condiciones totalmente desventajosas, y que había que estar a la defensiva en medio de esa carnicería.
Dijo que con el paso del tiempo Lula y el Partido de los Trabajadores (PT) alcanzarían la victoria.
“Pienso que esa es una de las mejores pruebas de que nuestros pueblos siempre han estado llenos de coraje, de optimismo, defendiendo los principios, los ideales de justicia, libertad, soberanía, patria, aún en las más difíciles circunstancias”, señaló.
El Comandante recordó la expansión del campo socialista, iniciado con la Revolución de Octubre (1917) y que puso fin a la Rusia Zarista. Manifestó que fue la Rusia fundada después de la revolución la que fue determinante para derrotar el fascismo y salvar a la humanidad. Subrayó que el pueblo ruso tiene una larga historia de lucha, reflejado también en la batalla contra las fuerzas napoleónicas.
El Presidente remarcó que a pesar que el campo socialista desapareció a inicio de los 90, este dejó una enorme herencia que va más allá de la derrota del fascismo.
Destacó el papel de la extinta Unión Soviética en apoyo a los pueblos y gobiernos de África, Asia y América Latina para liberarse y defender su identidad como naciones.
En «las batallas desde la zona del Magreb hasta el sur de África, toda África recibió la solidaridad no solamente militar sino que también solidaridad en el campo económico, en el capo comercial, y las naciones que se iban liberando inmediatamente acercándose a la Unión Soviética, e incluso recibiendo beneficios dentro de lo que era el mercado común que tenia el campo socialista, que le abría las puertas también, reconociendo las asimetrías a los países subdesarrollados y llevando educación, salud, todo lo que ellos tenían», explicó.
«Todas esas naciones lograron luego, independientemente de los grandes retos que siguieron enfrentando después de la desaparición de la Unión Soviética, han logrado resistir, porque habían logrado acumular fuerzas gracias a la solidaridad del campo socialista», añadió.
Socialismo solidario con Nicaragua
Mencionó que el apoyo de la Unión Soviética y del campo socialista iba más allá de lo militar, señalando que miles de personas se profesionalizaron en áreas técnicas y carreras como medicina, para que pudieran desarrollar la economía de sus países y siguieran librando la batalla por la independencia.
«Y aquí en Nuestramérica fue determinante la solidaridad incondicional de la Unión Soviética, con la Cuba revolucionaria, con Nicaragua. Fue incondicional esa cooperación y fue determinante para poder lograr una acumulación en lo que era el terreno económico asediado, en guerras», indicó.
Daniel recordó cómo Nicaragua fue apoyada por el campo socialista cuando el país sufrió el bloqueo comercial por parte de Estados Unidos.
«Recuerdo cuando nos bloquean el petróleo por todos lados, cortan el petróleo a Nicaragua. Bueno, fui a conversar con Fidel (Comandante Fidel Castro Ruz). Fidel ya tenía la respuesta, inmediatamente él se comunicó con todos y cada uno de los países del campo socialista y cada uno puso una cuota de petróleo para cubrir todos la cuota de petróleo de Nicaragua. Y ahí no se hablaba de un préstamo de corto plazo, ni un préstamo de mediano plazo, ni un préstamo de largo plazo; mucho menos se hablaba ahí de intereses, simplemente se trataba de auxiliar a un pueblo que estaba agredido», comentó.
El mandatario valoró que la revolución que tuvo el campo socialista dejó una herencia, que es la contribución a la liberación de los pueblos en Asia, África y América Latina.
Particularmente en Nicaragua, dijo que el apoyo de la Unión Soviética, en tiempos de Gorbachov, permitió que Nicaragua se capitalizara.
«Todo esto permitió que tuviésemos con qué defendernos, permitió que tuviésemos con qué alimentarnos. Y no es que la Unión Soviética nos entregó armas nada más para que nos defendiéramos: nos formó miles de jóvenes; miles de jóvenes formados en Rusia, en Alemania democrática, en Bulgaria, Checoslovaquia», aseguró.
«Fue una cooperación, una solidaridad incondicional que les cuesta creer a las potencias, porque las potencias siempre condicionan su cooperación; la condicionan», añadió Daniel, explicando que la práctica expansionista de la potencia es la del sometimiento, de condicionar lo que llama “ayuda”.
El Comandante reiteró que la herencia de la Revolución de Octubre del Pueblo Ruso, así como la del campo socialista, pueblos de obreros y campesinos que derrotaron el fascismo es inmortal.
De la misma manera aseguró que los avances que se han dado en Nuestramérica son irreversibles y no existe gobierno de derecha que pueda revertir los espacios y caminos que se han abierto en cada país.
«Son espacios y caminos que ya nos los pueden cerrar, los gobiernos más conservadores que pudieran instalarse en nuestra región, ya no pueden cerrar esos espacios», afirmó.
La lucha es con los votos
Daniel señaló que los espacios abiertos por la Revolución son espacios que jamás serán cerrados.
“Se abrió un campo inmenso para seguir dando la batalla y recuperar aquellas colinas que hoy se nos han tomado nuestros adversarios. Y hemos aprendido a combatir ahora con nuevas armas. Antes como que la única alternativa eran las ideas acompañadas por los fusiles. Ahora, porque los espacios que se han abierto ya no pueden ser cerrados, es que entonces coincidimos la inmensa mayoría de los revolucionarios latinoamericanos y caribeños que la batalla se da con las ideas y que el camino para tomar la colina, ya no es con la balas sino con los votos, y hemos aprendido a combatir en ese campo”, indicó.
El mandatario dijo que conquistar una posición en una alcaldía era impensable en otros tiempos cuando incluso estaban incluso proscritas las fuerzas de izquierda para participar en las elecciones.
“Hemos aprendido que ganar una Alcaldía es importante, y que si ganamos una alcaldía podemos ganar dos, podemos ganar tres, podemos ganar cuatro, podemos ganar más alcaldías o gobernaturas donde hay gobernaturas o el gobierno nacional, que es lo que más irrita a los que se han sentido dueños de la democracia en nuestras regiones”, indicó, y dio como ejemplo el caso de Lula, un obrero, o Dilma Rousseff, asumiendo la presidencia de Brasil o bien a Chávez en Venezuela, todo ello a través de las elecciones. A lo que también hay que sumar Bolivia, con Evo Morales; Ecuador, con Correa; Uruguay, con Tabaré Vázquez y Pepe Mujica; y Paraguay con Fernando Lugo.
Procesos revolucionarios siempre están bajo amenaza
Daniel afirmó que el camino hay que irlo haciendo porque siempre los adversarios van a recurrir a todas sus armas para intentar destruir estos procesos. En este punto, recordó el intento de golpe contra el Comandante Hugo Chávez, el cual fue aplaudido por quienes se erigen dueños de las democracias en el campo internacional.
“Ahí no había organismos internacionales condenando semejante crimen. Un crimen a mansalva y a la vista de todo el mundo y transmitido en directo”.
“Fue el pueblo el que finalmente sacó del palacio a los golpistas y llevo de nuevo a Chávez a donde tenía que estar, donde lo había puesto el pueblo, a la Presidencia de la República Bolivariana de Venezuela”, agregó.
Daniel dijo que el 10 de enero puso el contraste de lo que es una fuerza revolucionaria en oposición, cuando durante 17 años el Frente fue una oposición con una inmensa fuerza capaz de paralizar Nicaragua, sin un solo tiro, y así tirar el gobierno, pero que nunca se le ocurrió hacerlo. Ello a diferencia de los adversarios que alientan “golpes de estado” y desestabilización.
Dijo que esa batalla está presente y que ha sido librada desde tiempos inmemoriales, logrando actualmente grandes avances.
Para el mandatario aquí no hay un espíritu derrotista sino de lucha, de combate y de victoria.
Expresó que la propuesta en la que se ha trabajo hasta el momento es en la distribución de la riqueza, lo cual es malo para quien quiere la concentración de la riqueza, lo cual genera a su vez instabilidad, inseguridad y violencia.
Daniel dijo que el gran debate es la lucha contra la pobreza, aunque los adversarios políticos ven esto como una conspiración.
Temas de interés del Foro de Sao Paulo
Manifestó que la inseguridad, el tráfico de personas, el crimen organizado y el narcotráfico, el derecho a la salud, a la educación, el empleo, la seguridad social, el acceso a los recursos y las tecnologías para contrarrestar el Cambio Climático, son los temas que afectan a los pueblos, y los que están en la agenda del Foro de Sao Paulo.
Sin embargo, enfatizó que lo que los adversarios llaman conspiración es más bien una conspiración por la vida y por los derechos.
Daniel aseguró que la Madre Tierra está siendo asesinada por el modelo económico que impera en el mundo, de ahí que Nicaragua no quiso firmar el Acuerdo de París, ya que este no obliga a su cumplimiento. En este sentido, indicó que hay un retroceso enorme en relación al Acuerdo de Kyoto.
Batalla desventajosa en la democracia burguesa
El Comandante expresó que los sistemas políticos electorales y la democracia burguesa no tiene nada de democrática, pero que sin embargo, ha tocado librar la batalla en esas condiciones desventajosas.
Manifestó que eso ha “puesto a prueba la fortaleza de la lucha de los pueblos en Nuestramérica”.
Señaló que esto ha tenido como resultado una larga historia de masacres y crímenes contra los trabajadores en el continente. Recordó hechos tan monstruosos como el arrancarle el hijo a una madre para ser criado luego por sus victimarios. Eso “pone en evidencia la decadencia de ese sistema y de ese modelo”, subrayó.
Aún así, sostuvo que el camino es la vía electoral, y señaló el caso de Lula de correr nuevamente como candidato electoral, con muchas posibilidades de alzarse con la victoria.
Todo proceso de integración es complicado
El Presidente también se refirió a la advertencia que el Foro de Sao Pablo hace sobre el peligro que corren los procesos de integración de ser revertidos.
Daniel remarcó que en efecto todo proceso de integración es complicado, sobre todo en regiones como la latinoamericana, donde las economías son desiguales y no existen las condiciones de un desarrollo económico como lo han tenido otros grupos de naciones como en Europa.
«Contaban con un desarrollo y con unos recursos para poder aplicar una política compensatoria para con los países más rezagados, más empobrecidos, y así Portugal, España, Grecia lograron integrarse, lograron unirse», explicó.
Agregó que en nuestro continente, a pesar de tener una cultura común, y lenguas que nos unen, nos ha costado unirnos o integrarnos, y como ejemplo puso la integración centroamericana, que no ha avanzado todo lo que debería avanzar para desarrollar más la región.
También resaltó otros espacios de integración en el sur del continente como el Mercosur y la Unasur, pero se preguntó hasta donde está la integración real y fortalecida que impacte directamente en el campo económico y comercial.
«Para poder crecer todos, incluyendo el que está mejor, algo tendrá que aportar y eso le va a resultar en mayor beneficio y es lo que nos cuesta entender», reflexionó Daniel.
CELAC, ALBA y PetroCaribe son expresiones de integración superior
El Presidente señaló que espacios como la CELAC, el ALBA y Petrocaribe son expresiones de integración superior donde se toman en cuenta las asimetrías, y se espera que en la CELAC se construya un esquema de integración como el que se ha ido construyendo en el ALBA y Petrocaribe, donde se toman en cuenta las asimetrías.
«Entonces ahí sí iremos hacia una verdadera integración o hacia una verdadera unidad latinoamericana y caribeña que nos va a hacer más potentes y más fuertes», valoró.
Documento es base para fijar objetivos comunes
Daniel manifestó que el documento elaborado por el Foro de Sao Pablo constituye una base para ir fijando entre los países objetivos comunes y particulares.
También refirió que ámbitos como la comunicación y los movimientos sociales deben ser potenciados en estas nuevas condiciones históricas y se debe revisar cómo lograr adaptar la lucha a las nuevas condiciones culturales, tecnológicas, comunicacionales, que son las que están privando en el siglo XXI en nuestra región y que son los nuevos instrumentos de lucha.
El Presidente indicó que la juventud debe incorporarse a los objetivos que se señalan en el documento del Foro de Sao Pablo, para seguir enriqueciendo el documento.
«Este es un instrumento, una guía para la acción» afirmó Daniel, señalando que se va a ir enriqueciendo con el aporte de la juventud y de las mujeres.
Daniel dijo que los objetivos de los gobiernos revolucionarios no van a variar independientemente del modelo globalizador, de tal forma que se luchará para que el modelo sea más justo.
Apuntó que estos son los objetivos, a pesar de que hay otras fuerzas en el planeta y una interdependencia de la economía mundial.
Libertad para Oscar López Rivera
Daniel aprovechó también para reiterarle la petición al presidente Barack Obama que ponga en libertad al patriota puertorriqueño Oscar López, quien de sus 75 años de vida, 35 años los ha pasado en la cárcel.
Así mismo agradeció al Foro de Sao Paulo su acompañamiento a este momento histórico en que se le está dando continuidad al proceso revolucionario iniciado en 1979. Al respecto, afirmó que la lucha del Frente Sandinista y del pueblo nicaragüenses es de todos, de tal forma que las victorias de Nicaragua también son victorias para todos los pueblos que han acompañado este proceso.