La compañera Rosario Murillo, vicepresidenta de la República envió un abrazo solidario a nombre del Gobierno de Nicaragua a las 111 familias de Managua que resultaron afectadas por los fuertes vientos ocurridos la madrugada de este jueves 17 de septiembre.
“A las familias de Monseñor Lezcano, que anoche vivieron un susto, esta madrugada, fuertes vientos en Managua, rachas hasta de 100 kilómetros por hora, es el fenómeno de bajas presiones que ha influido en nuestro país”, comentó la vicepresidenta.
Confirmó que fueron 111 viviendas afectadas, “a todas estas familias, un abrazo solidario y la presencia que pudieron ver, efectiva, solidaria, cristiana de las instituciones de este gobierno que sirve a todos por los principios y valores cristianos que nos animan”, subrayó.
“Un abrazo muy especial a todas estas familias devotas, cristianas, las familias que también son parte de la comunidad, de la iglesia católica Sagrado Corazón de Jesús. Un saludo muy especial al Párroco Padre Sebastián Zeledón Zeledón a todos ellos, nuestro compromiso de seguir actuando ahí, de inmediato”.
“Estaba ahí la policía garantizando que al irse la energía no ocurrieran mayores incidencias, garantizando la seguridad de la comunidad, garantizando los bomberos la cobertura frente a cualquier siniestro que pudiera darse, la defensa civil, del Ejército de Nicaragua, el Sinapred, los gabinetes de la familia, los promotores solidarios todos juntos, y Enatrel, todos juntos”, agregó.