La comida que consumimos puede afectar dramáticamente nuestro nivel de atracción, como se afirma en el estudio publicado por la revista ‘Appetite’ hace un año, pero del cual los medios de comunicación se acaban de hacer eco.
De acuerdo con la investigación, si los hombres quieren parecer más atractivos a las mujeres tienen que comer más ajo.
Precisamente el olor distintivo (y desagradable para algunos) del ajo permite mejorar la percepción del cuerpo masculino por parte de las mujeres, dado que con los elementos útiles que contiene mejora su aroma.
En el marco del estudio 42 hombres fueron divididos en dos grupos: los que comían ajo crudo o en cápsulas y los que no lo consumían. Después los científicos entregaron las muestras del sudor de los participantes masculinos a 82 mujeres, que en su mayoría afirmaron que el olor de los hombres que consumían ajo era «significativamente más agradable, atractivo y menos intenso».
«Nuestros resultados indican que el consumo de ajo puede tener efectos positivos sobre la hedonicidad de la percepción del olor corporal (el placer derivado de ella), tal vez debido a sus efectos sobre la salud, por ejemplo, las propiedades antioxidantes y la actividad antimicrobiana», concluyeron los investigadores.