Necesitaron solo de 40 días y no más de tres lloviznas, como ellos las califican, para que el Frijol Solidario les diera una buena producción para por lo menos recuperar la semilla y así sembrar en postrera.
René García afirmó que durante el ciclo de primera les hizo falta semilla para completar las dos manzanas que habían pensado cultivar inicialmente, por lo cual aprovecharon la pasada del camión distribuidor de Frijoles Solidarios para comprar cinco libras para sembrarlas.
Melvin Flores aseguró que como pequeños productores siempre están dispuestos a probar nuevos experimentos para mejorar sus cultivos y la idea de sembrar el grano de los frijoles solidarios les dio muy buenos resultados, que esperan continuar experimentando durante el ciclo de postrera.