Cero tolerancia a los conductores que manejen en estado de ebriedad, es lo que implementará la policía con el objetivo de disminuir los accidentes de tránsito que enlutan a las familias nicaragüenses, dijo este domingo el comisionado Juan Valle Valle, jefe de transito de Managua.
Lo anterior lo afirmó el jefe policial al dar a conocer los resultados del plan de seguridad en las calles ejecutado la noche del viernes y la madrugada del sábado en Managua, que dejo 103 motocicletas y 66 carros retenidos, porque los conductores andaban bolos, sin papeles o sin casco de protección.
Los vehículos fueron llevados al depósito municipal, y serán entregados a sus dueños hasta que presenten la documentación legal, y paguen la respectiva multa.
El comisionado Valle Valle dijo que fue lamentable ver durante el operativo a muchos adolescentes borrachos o drogados, conduciendo carros y motos a alta velocidad en carreras ilegales, principalmente en la carretera a Masaya.
El jefe policial criticó fuertemente la irresponsabilidad de varios padres de familia, que estaban bolos con sus hijos participando en las carreras ilegales, y que la arremetieron contra los oficiales cuando les llamaron la atención y se les llevaron los vehículos.
Durante el operativo realizado en el marco del Plan Diciembre Seguro 2014, se detuvo a 25 conductores de carros y motos, los que fueron llevados a los distintos distritos policiales.
El jefe de tránsito en Managua reiteró que pondrán mano dura contra los conductores borrachos, y en el caso específico de los motociclistas, independientemente de que manejen sobrios o bolos, los que no usen casco de protección, serán multados y su medio de transporte llevado al depósito municipal.