La directora general de la Policía Nacional, Primera Comisionada Aminta Granera Sacasa, presentó a Miguel Ángel Reñazco Padilla, uno de los acusados de participar en la masacre de cuatro agentes policiales en Bluefields en mayo del 2004.
El sujeto fue deportado de Costa Rica y entregado a las autoridades policiales nicaragüenses la mañana de este martes, luego de haber sido capturado el 28 de junio del año pasado en el vecino país en donde se mantuvo oculto durante nueve años.
La captura de Reñazco fue solicitada por el gobierno de Nicaragua, por lo que agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Limón y la Interpol le dieron cacería y lo detuvieron en Pocora, Limón.
La madrugada del cuatro de mayo de 2004, un grupo de sicarios atacó la sección de Auxilio Judicial en la delegación policial de Bluefields, y asesinaron a los oficiales: Juan José Fúnez, Ruth González, Johnny Dometz y Róger Villachica, e hirieron de gravedad a Estela Valderrama.
En junio del 2006, un jurado de conciencia declaró inocentes a Marcos Reñazco Padilla, José Ángel Padilla Oporta y Carlos Alberto Padilla Oporta, conocidos como la banda de los Reñazco, acusados por supuesta colaboración con Robert Wilson, alias “Calidad”, el colombiano que dirigió a los sicarios que mataron a los policías.
Delvin Jirón Gutiérrez, ex agente antidrogas de Bluefields, es la única persona que cumple condena por colaboración necesaria en la masacre de los cuatro oficiales, señalado de brindar información y facilitar la movilización a los sicarios.
El colombiano Robert Wilson, alias “Calidad”, también guarda prisión