Un cabello encontrado en la mano de la víctima fue la prueba científica contundente con la cual la Jueza de Distrito Penal de Juicio en Nueva Segovia, Verónica Fiallos Moncada, declaró culpable a Julio Cesar Montenegro Centeno, de 30 años, alias “El Boxeador”, a quien le impuso la pena de Prisión Perpetua por el delito de Asesinato Agravado.
La sentencia de culpabilidad fue notificada por la jueza Verónica Fiallos por el Asesinato Agravado en perjuicio de José Ariel Hoyes Pravia, cometido en el empalme de Arenales en Quilalí, la madrugada del 26 de diciembre del año 2021.
Testigos declararon en el juicio que el día de los hechos, el acusado estaba en el mismo bar que la víctima, sin haber tenido ningún tipo de comunicación.
Luego José Ariel Hoyes, conocido como “Calero” abandonó el bar en la madrugada y poco después se fue el acusado Julio Cesar Montenegro, para darle alcance, dejando a medias una cerveza que se estaba tomando junto al dueño del bar.
A las 6 de la mañana del día 26 de diciembre el cuerpo sin vida de “Calero” fue encontrado por un campesino que pasaba por el lugar.
Según el dictamen post mortem realizado al cadáver, la víctima tenía múltiples heridas, signos de violencia y lesiones en la cabeza, brazos y cara, como producto de haber sido agredido por alguien que tiene mucha fuerza, y prácticamente fue degollado.
La hermana de la víctima dijo en el juicio que su hermano no tenía enemigos y que el problema se originó porque este expresaba públicamente que le ganaba a los golpes al “Boxeador”, quien practicaba boxeo, se dedicaba a domar búfalos y era entrenador en un gimnasio en Costa Rica de donde regresó a Nicaragua un mes antes de los hechos.
La prueba principal presentada por los expertos fue la pericial o científica, que consistió en un cabello encontrado en una de las manos de la víctima, y el cual pertenecía precisamente al “Boxeador”.
La doctora Fiallos consideró meritorio aplicar la Pena de Prisión Perpetua al acusado Julio César Montenegro Centeno, alias “El Boxeador”. Esta es la tercera pena de Prisión Perpetua dictada en el Juzgado Distrito Penal de Juicio en Nueva Segovia.
En la sentencia, la judicial determinó que en el crimen hubo alevosía, saña y que la víctima se encontraba en indefensión por su alto estado de ebriedad, en un lugar despoblado y de madrugada, circunstancias que son tomadas en cuenta para calificar los hechos como Asesinato Agravado e imponer la Pena de Prisión Perpetua.