A 37 años de cárcel fue sentenciado un sujeto de 41 años de apellido Urbina quien se hacía pasar como pastor evangélico, y que fue encontrado culpable de violar en Matagalpa, a una hija que actualmente tiene 13 años de edad.
El juez William Mariano Montalván Avendaño, del Juzgado Segundo de Distrito Especializado en Violencia en Matagalpa, explicó que el delincuente fue sentenciado a 25 años de cárcel por el delito de violación y 12 años por abuso sexual, pero solo pasará 30 años en prisión por mandato constitucional.
El testimonio de la menor y de su madre fueron determinantes para demostrar la culpabilidad del acusado, quien desde el año 2020 llevaba a la niña a un campo de futbol supuestamente para enseñarle a manejar, pero lo que hacía era abusar de ella.
A raíz de las agresiones sexuales, la niña que entonces tenía 11 años, empezó a cambiar su comportamiento, y fue hasta el año pasado cuando le confesó a una maestra que logró ganar su confianza, que su padre la violaba.
El juez William Montalván también ordenó que el condenado cumpla su sentencia en el Sistema Penitenciario de Waswalí, en Matagalpa.