Un hombre de apellidos López Gutiérrez deberá de pasar a 30 años de prisión por haber abusado sexualmente de una menor de 12 años en la comunidad de San Juan del Río Coco, Madriz.
Los hechos ocurrieron el 27 de octubre de 2024, en la vivienda que compartían.
Según el relato judicial, 14 meses antes, en agosto de 2023, López Gutiérrez ya había ingresado por las noches a la habitación de la menor, entonces de 11 años, para tocar sus partes íntimas.
Para ese entonces la silenciaba amenazándola con suicidarse si lo denunciaba.
La madre de la víctima notó un cambio en el comportamiento de su hija, quien finalmente le confesó los tocamientos.
Ante el descubrimiento, el agresor pidió perdón a su pareja, argumentando que cambiaría por el bebé que recién habían procreado.
Confiando en su arrepentimiento, la mujer lo perdonó, pero le exigió que se fuera de la casa. López Gutiérrez se marchó a trabajar a Honduras y El Salvador.
Sin embargo, en abril de 2024, el agresor regresó a la vivienda y el 27 de octubre, encontró a la menor sola con su hermano de 10 años, debido a que su mamá andaba en el hospital con el recién nacido.
Para cometer su fechoría, mandó al niño a comprar golosinas y, al quedarse a solas con la víctima, la violó. Para evitar que gritara, le tapó la boca y volvió a amenazarla con suicidarse.
La madrugada del 2 de enero de 2025, López Gutiérrez intentó ultrajar a la menor nuevamente mientras dormía, pero fue descubierto por la madre, quien procedió a interponer la denuncia.
Por estos graves delitos, el juez a cargo del caso sentenció a López Gutiérrez a 12 años de cárcel por abuso sexual, 25 años por violación agravada a menores de 14 años, y 9 años por violación en grado de frustración a menores de 14 años.
Aunque las penas suman 46 años, el agresor deberá cumplir un máximo de 30 años de cárcel, de acuerdo con el artículo 35 de la Constitución Política de Nicaragua, que establece esa como la pena máxima, a excepción de la prisión perpetua revisable.