El auditor médico del Ministerio de Salud, Carlos José Jácamo, afirmó que encontraron irregularidades en el expediente clínico de la operación de liposucción y aumento de glúteo realizado a Lizandra Jarquín por parte del doctor David Páramo, acusado de homicidio imprudente.
Así lo dejó en claro el doctor Jácamo, coordinador de la comisión investigadora del Minsa, durante su testificación ante la judicial María Ivette Pineda, titular del Juzgado Sexto Local Penal de Managua, donde se ventila el caso.
La Comisión médica que encabeza el doctor Jácamo, la integran varios especialistas en la materia incluyendo al doctor Alberto Moreno, subdirector del hospital Lenin Fonseca y uno de los mejores cirujanos plásticos del país.
El doctor Jácamo, relató que en la auditoría realizada al expediente clínico, se encuentra que en la hoja de consentimiento informado, el cirujano David Páramo, no informa a Lizandra que sería sometida a una mega liposucción (procedimiento para el que no era apta) y menos los riesgos que correría.
En la auditoría queda claro que hubo irregularidades en el manejo de los formatos establecidos para realizar ese tipo de cirugía e inadecuada conducción en el acto quirúrgico.
En la continuación del juicio declararon 10 de los 50 testigos propuestos por el Ministerio Público. Entre ellos Fabio Centeno, técnico quirúrgico, que labora en el hospital Salud Integral, donde el doctor Páramo realizó la operación a Lizandra, el pasado 17 de junio.
La abogada Karina Duarte, encargada de la defensa del doctor Páramo, durante su interrogatorio a los testigos propuestos por el Ministerio Público, intento desvirtuar la auditoria y propuso a la judicial, fueran tomados en cuenta como testigos, médicos extranjeros, solicitud que fue rechazada por la juez.
La juez Sexto Local Penal de Managua, después de escuchar las pruebas testimoniales y documentales y periciales, decidió suspender el juicio para los próximos días y ratificó la medida cautelar de prisión preventiva contra el acusado.
En el juicio estuvieron presentes Sandra González, madre de Lizandra y Lester Rodríguez, esposo y ahora viudo, quien al llegar el momento de la testifical del doctor Alberto Moreno, solicitó a través de la fiscal Kenia Jirón, la retirada de los periodistas y cámaras, porque se iban a presentar imágenes del cuerpo de la Lizandra.