La muerte del pequeño de dos años Lane Graves en uno de los hoteles que existen en Walt Disney World, en Orlando, podría derivar en un juicio millonario contra la compañía de entretenimientos.
El hecho ocurrió en el Grand Floridian Resort & Spa de Magic Kingdom, donde la familia Graves se alojaba. En la playa repleta de reposeras estaba Lane, quien fue atacado por un cocodrilo la noche del martes. El padre intentó rescatar al niño, pero no pudo. Varias horas después, su cuerpo fue encontrado sin vida.
El hecho conmocionó no sólo a Orlando, sino al resto de Estados Unidos y el mundo. Y a pesar de los esfuerzos de las autoridades de Disney por circunscribir todo en un «trágico accidente» -como señala el comunicado firmado por su presidente George A. Kalogridis– el parque de atracciones está a las puertas de enfrentar un juicio millonario.
Un conocido abogado de Orlando, experto en demandas, confirmó que la firma podría ser denunciado por ocho cargos y explicó las deficiencias que según su entender ocurrieron para que un cocodrilo de casi tres metros atrapara al niño y lo matara.
«Esta familia puede presentar una demanda por muerte injusta en contra de Walt Disney World Corporation si tenían conocimiento real de una condición peligrosa en sus locales», indicó el letrado Matt Morgan en declaraciones al sitio Radar. «Fácilmente será un caso de ocho cifras, basado en el dolor y el sufrimiento de esos padres en su vidas», agregó el abogado.