El volcán costarricense Turrialba presentó hoy dos nuevas exhalaciones de ceniza y gases, demostrando una vez más su comportamiento histórico, caracterizado por períodos cíclicos de relativa calma y etapas eruptivas de variada intensidad.
El reporte matutino del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori) indica que durante la madrugada de este sábado se registraron explosiones en el coloso, uno de los cinco -Arenal, Irazú, Poás, Rincón de la Vieja y Turrialba- activos de los 112 existentes en Costa Rica.
La primera erupción, precisa el Ovsicori, ocurrió a las 01:02 hora local y produjo una columna no superior a los 500 metro sobre la cima del cráter, mientras la segunda se registró a las 01:38 hora local.
Los vientos soplan hacia el suroeste desde la cima del volcán, apunta el informe de la entidad perteneciente a la Universidad Nacional, el cual agrega que sobre las 07:30 hora local disminuye el tremor en amplitud, así como las emanaciones de ceniza.
El lunes pasado, el Turrialba también explotó en dos ocasiones y al día siguiente entró en un período de calma, interrumpido este viernes, con una exhalación a las 11:50 hora local. Unas 13 horas después mostró las actuales emanaciones.
La dirección del viento tiene influencia en el Valle Central, asiento de la Gran Área Metropolitana, donde reside el 60 por ciento de los 4,3 millones de costarricenses, quienes desde abril pasado, cuando comenzó la presente etapa eruptiva del cerro, son afectados por la ceniza y los gases del coloso.
Tras más de 130 años pasivo, el Turrialba despertó en 2007 y desde el 5 de enero de 2010 presenta erupciones de consideración, como las de octubre de 2014 y la del 12 de marzo de 2015, que obligaron a suspender el tráfico aéreo en esta capital.