Un gigantesco hoyo se abrió repentinamente en una carretera de China, tragándose un autobús lleno de pasajeros y causando 6 muertos y diez desaparecidos.
Las operaciones de rescate seguían en marcha y se abrió una investigación para determinar el origen del accidente. El estado de 16 personas heridas es “estable”.
No es primera vez que sucede este tipo de catástrofes en China, ya que en 2016, varias personas cayeron en un agujero que se abrió de golpe en una calle de la ciudad de Zhengzhou, capital de la provincia de Henan (centro).
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