Un cocinero murió tras inhalar los gases tóxicos desde el drenaje de su cocina los cuales fueron tirados ilegalmente en un parqueo que estaba ubicado detrás de su restaurante en el norte de China.
La policía descubrió que el dueño del parqueo en la ciudad de Baoding permitió que varias empresas tiraran desechos tóxicos en su tuberías de drenaje a cambio de fuertes sumas de dinero. En total se estima que virtieron 3,400 toneladas de desechos tóxicos entre Agosto de 2014 y Mayo de 2015.
Por este caso 27 personas fueron arrestadas y se vieron involucradas unas 20 empresas.